sábado, 15 de noviembre de 2008

Descubriendo un nuevo mundo

(Dedicado a Herr Professor en agradecimiento por sus tomates asesinos...)

Me despierto de un sueño extraño. En la habitación del hotel, las únicas luces vienen de los pilotitos rojos de la tele, el decodificador TDT, de un interruptor. No puedo dormir, así que fumo. Fumo demasiado, pero no importa. Mi cigarro es otra lucecita roja en este cuarto vacío. Juego a imaginar que los electrodomésticos tampoco pueden dormir, que sus pilotos son cigarrillos como el mío, que fuman en silencio mientras piensan en sus cosas de electrodomésticos. La tele tal vez esté harta de dar siempre la misma mierda, pero no se me ocurre por qué no puede dormir el interruptor.
Yo pienso, como el otro día, en mis propias cosas y eso me lleva a ti. Pienso en un beso, en tu lengua paseando por mi lengua, en un abrazo casi demasiado fuerte. En el placer. Pienso en lo que dices y también en lo que callas y en cómo escucho atento tus palabras. Y tus silencios. Pienso/imagino/recuerdo amar tu cuerpo y amar tu mente. Escuchar tu risa. En ese momento eres mundo, y yo, realidad. Te contemplo en tu belleza. En tu poder de astro, de planeta de bosques y playas y huracanes, y de pequeñas miserias secretas. Intento seguir tu trayectoria por el cielo estrellado de esta habitación. Recuerdo/pienso/imagino, pero no consigo expresar, que yo también he sido mundo. Que no me he limitado a observar, que he vivido. Que otros me observaron, que tú me mirabas como ahora deseo que lo hagas. Que en otros momentos he sido, soy, un planeta vivo y no un mero espectador. Que deseo curarme de tanta realidad. Que me siento como un alquimista frustrado. Así que saco un cigarro, otro para la tele, y los dos fumamos en silencio en esta habitación vacía.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Es precioso. Me gustaría ser tú aunque no pudiera dormir.

Pichichi dijo...

Por mi parte no hay inconveniente en que se sume a ser yo, querido/a anónimo, así seremos más.

ÉCHANGE dijo...

Cabrón, me has hecho llorar.

Pichichi dijo...

Gracias, me siento muy halagado