jueves, 12 de marzo de 2009

Memorándum?

He visto a un chaval correr huyendo de la policía. Ha pegado la vuelta a la manzana y se ha alejado por mi izquierda, y luego otro giro y lo he perdido. ¿Por qué corres chaval? Me he cruzado con un viandante unos metros más adelante y me ha dicho que el chaval ha saltado por el muro del viejo cauce y que ha seguido corriendo por el parque que hay ahora donde estuvo el río.

-Algo habrá hecho.
-O algo llevaba…

Hemos seguido hablando así de profundos mientras cruzábamos el puente de las flores, pero al poco mi compañero improvisado se ha parado para buscar en una papelera. Tal vez encuentre el alma de Pípol.

He paseado de camino a casa con el dinero en el bolsillo, valorando las posibilidades de la vida y de la muerte. Me he encontrado con Luís tumbado en la cama. Me he sentado a su lado.

- Luís, levántate y anda.
- ¿Y para qué? Sabes, estoy muerto. Me han acuchillado, salté por la ventana, me chafó el tren.

He argumentado con porqués los motivos para levantarse y él los ha rebatido con y para qués. Y al final me he dado cuenta de que el que estaba tumbado era yo y que Luís ahora estaba sentado.

- Anda Pichichi, levantate!

Pero Luís ya era Carlos. Y Carlos seguramente ahora sea Fernanda y Ana será el chaval que huía de la policía o un koala desalmado y así no hay quien se aclare y yo ya no sé cómo seguir porque a estas alturas de la historia nadie parece ser quien yo creía, mucho menos yo mismo.

He escuchado música de camino al trabajo esta mañana y he bailado con el Iron Lion Zion y he cantado con I got my mind set on you o el Rocka Rolla. Y he deseado no tener que meterme en esa oficina oscura, trabajar de jardinero en la calle y quedarme al sol este de primavera que ya casi calienta. Me he acordado de gente hoy. Todos ausentes. Todos out. Tutti Pavarotti. Qué le vamos a hacer. Tampoco tenía nada que decirles. Simplemente me he acordado de ellos.

He hecho las gestiones oportunas para que un perito visite el taller donde dejaré el coche con la cerradura de la puerta del copiloto forzada. He decidido que esto se titularía “Memorándum?” y lo he tecleado en un PC, y he vivido un día entero lo que significa que he envejecido un día y acaso que he madurado unos minutos. Absurda carrera. Las 00:23, me voy a dormir.

always look on the bright side of life

7 comentarios:

Anónimo dijo...

La prisa te está matando.
Entre el trabajo, las carreras, la cerradura del coche (de la puerta del copiloto) y lo demás, se te han pasado las doce de la noche (como a Cenicienta), y ahí estás, sin saber qué hacer con Luis, si enterrarlo o resucitarlo y volverlo a matar.
- ¡El tío se ha tumbado en la cama!, con el trabajo que tengo y lo cansado que estoy.

Y el pobre Pípol sigue mal clasificado; ya te he dicho que no puedes archivarlo como "basura" en un contenedor o en una papelera. Te lo había dicho ya ¿...no?
Mmmm, no sé, no me acuerdo, con tanto trabajo...

- Pues ya verás cuando el buen tiempo se convierta en costumbre; cuando veas a los perros durmiendo la siesta a sol (o a la sombra) mientras corres detrás o delante de alquien por el viejo cauce del río. Se está tan bien echado al sol.
¡Qué vida de perros!
Menos mal que hoy es viernes:
viernes 13 ¡Uuuuh!
Suerte que no somos americanos y que no es martes.

Anónimo dijo...

Hay una duda que me inquieta. El tren que coge a Luis ¿es de cercanías? ¿No seré un metro de superficie?
He consultado el plano de Guille para ver si alguna Línea 1 pasa por la playa, pero no se ve lo que hay debajo de las Líneas. Creo que el tren que coge a Luis es un metro, y él se baja en la Parada de tu cama.
Deberías darle una copia del plano, con instrucciones.

ÉCHANGE dijo...

Ayer estuvo bien... no sé si envejecí o maduré... probablemente las dos cosas significan algo parecido. Esta noche seguiré envejeciendo (de distinta manera que ayer) en un bar, y mi cubata envejerá menos porque no le daré mucho tiempo... le ahorraré ese mal "trago"... pero sé que vendrán otros detrás de ese primero... y sé que detrás de mí vendrán también otros... y la verdad es que poco importa. Lo mejor será que podré recordar (si los cubatas me lo permiten) que hubo un día que hice eso... un día hubo un cubata que fue el primero de una noche... y yo seré el mismo de hoy... el mismo tiempo que dura un juiski en mis manos... y un par de los que por aquí escriben, tal vez, sean capaces de recordarlo también o de hacermelo recordar...

Anónimo dijo...

Gracias porque ciertamente me ha venido de perlas volver a escuchar esa canción, besos y a pasarlo bien!

Pichichi dijo...

Señores y señoras Anónimo, Anónimo, Échange y Compresa, con ustedes más señores (y señoras).

La prisa sólo mata en años bisiestos y éste no lo es. Lo importante es tomarse con calma el 2012.

A nivel Pipol, digamos que por más que yo me esfuerce él se empeña en clasificarse como residuo orgánico en semiconserva y claro, con estos calores va cogiendo olorcillo...

El tren de Luís es en realidad una metáfora de un autobús de línea o de un ganso mensajero americano.

En algún lugar de la basílica de San Eulogio Arrejuntador existe un retablo donde, escritas en sanscrito, pueden leerse las instrucciones para utilizar el plano de metro de Guille. Por un extraño sortilegio esas instrucciones no pueden copiarse ni transmitirse sin cometer pequeños errores que sin embargo alteran por completo su significado y las convierten en una receta para preparar atascaburras. No diré más sobre este particular para evitar herir sensibilidades.

No podría precisar lo que significan las palabras envejecer o madurar si no refieren al vino en barricas y la fruta respectivamente. Sobre cubatas, el robot Emilio aconseja preguntar a Sabina.

Life's a piece of shit
When you look at it
Life's a laugh and death's a joke, it's true.
You'll see it's all a show
Keep 'em laughing as you go
Just remember that the last laugh is on you.

Anónimo dijo...

Verá usted, don Pichichi, puedo humildemente aclararle uno de sus dilemas basándome en la experiencia propia y diciéndole que, afortunadamente, yo ni envejezco ni maduro, paso directamente a un envidiable estado de putrefacción.
Muchos deberían tomar ejemplo de mí, ahorrándose así muchos quebraderos de cabeza en el futuro.
Respecto al resto de asuntos, no es que pretenda llevarle la contraria, ni mucho menos, pero opino que tiene usted toda la razón.
He advertido que sus escritos, de un tiempo a acá, van transmitiendo un creciente aire de pesimismo o tal vez de melancolía poco disimulados. Aunque sea escaso el contacto que ofrece este medio, no puedo menos que animarle cariñosamente a seguir adelante con su agudo sentido del humor y su inconfundible y grosero encanto.
Saludos.

Pichichi dijo...

Anónimo, poco disimulados, ejem! ejem!

Sí poco poco, por no decir nada nada.

Tengo un proyecto en mente que no es especialmente melancólico haunque tal vez un poco pesimista, pero así, en términos generales, sin centrarse en nadie en concreto. Espero que le guste, pero claro, para eso tendrá que leerlo y para eso yo tendré que escribirlo. Tiempo al tiempo.

Discrepo profundamente en cuanto a lo del "escaso el contacto que ofrece este medio". Sus halagos rastreros -en el mejor sentido de la palabra, por supuesto-, en general sus comentarios han sido realmente reconfortantes. Le deseo un feliz proceso de putrefacción y cuente conmigo para lo que quiera.

UN ABRAZOTE!